ser de hielo

2019 / fotografía / Madrid



Exploro mi cuerpo como si se tratara de un territorio, con elevaciones, dunas, pliegues y otros accidentes geográficos. Conforma un paisaje limpio, intachable. Blanco como el hielo. Con la misma apariencia de potencia y resistencia que a su vez emana fragilidad. Fragilidad ante el paso del tiempo, ante los agentes internos y externos. Cartografío esa fragilidad en el cuerpo.

Cada imagen es un fragmento, que implica una elipsis narrativa. Deja abierto un espacio de libertad para que entre la imaginación a com- pletarla. Ver cuerpo o ver paisaje, imaginar la continuidad del horizon- te como piel, como tierra o como hielo.

Fotografiar el cuerpo es una forma de retratar el tiempo hecho materia, tiempo corpóreo. Tiempo sólido y tiempo finito.